Lubina a la sal, un plato bajo en niveles en grasa


Hay infinidad de recetas para elaborar con lubina, pero una de las más conocidas es la que se elabora con sal. Un plato que contiene muy pocos niveles de grasa y no puede faltar en nuestra mesa.




lubina sal



La lubina, conocida también por el  nombre de róbalo, pertenece a la familia de los Serránidos, orden Perciformes. Este pescado nos ofrece un amplio abanico de recetas sanas y saludables por su bajo nivel en grasa al tratarse de un pescado blanco con más magro.

Tiene un alto contenido en vitaminas del Grupo B, y gran cantidad de mineras como el potasio, el hierro o el fósforo. Todas estas propiedades nutricionales son las adecuadas para el buen funcionamiento del sistema nervioso y el sistema digestivo. 

La lubina a la sal, es fácil de cocinar, sobre todo para novatos, y apenas su preparación es de una hora. Toma nota de esta receta casera.

Ingredientes para 6 personas


  • 1 lubina de 2 kilos con escamas y sin tripas
  • 2 kilos de sal gorda
  • 1 huevo, un chorrito de agua.
  • Patatas panaderas
  • 2 patatas grandes
  • Aceite
  • 3 dl de caldo de ave, perejil y tomillo
Mayonesa de ajo


  • 1 huevo
  • Vinagre o limón
  • Sal y pimienta
  • 3 vasos (de vino) de aceite de oliva
  • 1 diente de ajo


Elaboración

Amasar la sal con el huevo y el agua. Colocar el pescado en una bandeja de horno sobre una cama de sal y cubrir con el resto de la sal. Marcar con el dedo una ventana para poder retirar la costra con mayor facilidad una vez asado. Hornearlo a 200 ºC durante 35 minutos. Rociarlo de vez en cuando con agua, si es necesario.

Mayonesa de ajo


Mezclar el huevo batido con el vinagre o limón, la sal y la pimienta. Añadir poco a poco el aceite, en forma de hilillo, sin dejar de batir. Cuando tenga la consistencia deseada, añadir el diente de ajo pelado y mezclarlo todo junto.


Patatas panaderas


Pelar las patatas y cortarlas como para tortilla. Freírlas ligeramente en aceite y cubrirlas con el caldo de ave. Hornearlas a 180 ºC durante 30 minutos, aproximadamente, hasta que estén blandas. Espolvorearlas con las hierbas. Servir la lubina sin espinas, con las patatas y la salsa alioli.

Uno de los trucos para que la lubina a la sal quede jugosa es mantener las escamas para que la protejan de un exceso de sal.

¡Buen provecho!

Imagen: gallinablanca

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